Esta vivienda se encuentra ubicada en el corazón de Madrid, donde la ciudad nunca duerme y hay vida en cada esquina de esta emblemática calle: la Gran Vía. Ha sido el gran motivo por que escogimos como color principal el naranja.
Este color es divertido, sociable y alegre, que en estos momentos es muy necesario. Al mismo tiempo es un color llamativo, que nos excita y nos mueve por dentro, y el objetivo principal de esta decoración es buscarle novio a la vivienda. Nos habla de la tierra, la puesta del sol y la calidez.